domingo, 16 de mayo de 2010

Ensayo sobre la psicología de las masas. Parte 3

Así como puede uno plantear que las masas se forman de multitudes, también pueden aparecer masas de varios (sin saber qué cantidad de gente es ser “varios”), si el contexto no permite la aparición de multitudes. Un ejemplo de esto, se da en las reuniones de convivencia de individuos, donde aparece la metáfora del canibalismo social, las personas suelen juntarse, comer y beber, comenzando por ingerir los alimentos, para después pasar a ingerirse en el sentido metafórico a ellos mismos. En el caso de las celebraciones litúrgicas de la iglesia católicas observamos un ejemplo de lo que es un movimiento de varios individuos. Aquí la eucaristía es una metáfora de este canibalismo social.

En los movimientos de varias personas se cumplen las mismas características que en los movimientos de multitudes, pero adaptadas a la cantidad de personas que formas estos movimientos más pequeños.
Otro tipo de movimientos que cumplen con las características de los movimientos de masas, son los movimientos de dos individuos, poniendo como el mejor ejemplo, los enamorados. Entre las características que comparten con los movimientos de masas es la intención de ser uno solo, dos enamorados todo el tiempo buscan estar juntos y ser parte uno del otro. También tiene una falta de comunicación por medio del lenguaje, los enamorados son capaces de entenderse sin necesidad de recurrir a la conversación. Existe un sentimiento de omnipotencia, de que todo lo pueden y no existe el tiempo. 

La comparación de las características de las masas en un solo individuo, pasa a ser una psicología de la afectividad. Cuando el individuo se deja llevar por las pasiones, ocurre algo parecido a la psicología de las masas. 

Por último, la disolución de las masas aparece de la misma forma en que una masa se crea, de forma rápida y súbita. Existe otra forma en que se terminan los movimientos de masas, esta es por la institucionalización. Ejemplos como los movimientos revolucionarios que se estabilizan después de un tiempo o en el enamoramiento en su paso al amor o al matrimonio, y que se estabiliza por medio de un contrato social. 
La sociedad piensa de manera cíclica en donde a todo orden le corresponde un movimiento de desorden, volviendo al orden establecido después de un movimiento de masas.